MONARQUÍA ESPAÑOLA | ¿Qué han aportado los 50 años de monarquía parlamentaria a España y los españoles?
«Estas cinco décadas de monarquía parlamentaria enmarcan el gran salto modernizador de España en su historia contemporánea. En estos cincuenta años, hemos forjado una democracia sólida y plena. Y situado a nuestro país donde siempre mereció estar: en el corazón de una Europa unida. La España de hoy es un ejemplo para el mundo. No sólo en términos de estabilidad institucional. Sino de avance en derechos y libertades que supimos plasmar, unidos en nuestra Constitución».
[–>[–>[–>
«Inevitablemente tengo que matizar la pregunta. España no cumple 50 años de monarquía parlamentaria. Franco nombró a su sucesor, en la persona del rey emérito, para formar una monarquía autoritaria y continuadora del régimen. El pueblo español no participó nunca en esa decisión.
La monarquía parlamentaría aparece incluida en uno de los artículos de la Constitución (el 1.3) que se aprobó en 1978. Esta es la fecha que debemos celebrar como el nacimiento de la monarquía parlamentaria, sin olvidar cómo llegamos hasta ahí.
Humildemente, me habría gustado que a los ciudadanos se nos hubiera consultado específicamente bajo qué régimen democrático queríamos ser gobernados. Pero lo importante es que la democracia española fue real y eso es algo que debemos seguir celebrando. El acceso a todo tipo de libertades. Yo no habría podido hacer una sola de mis películas con el régimen anterior. También quiero decir, orgulloso, que hoy día la democracia española es la más avanzada del mundo en el reconocimiento de los derechos humanos y en la lucha por su defensa».
[–>[–>[–>
«Los últimos 50 años han sido, sin duda, el periodo más brillante de la historia de España y de Europa. España es un ejemplo de progreso y de éxito desde la llegada de la democracia. Y Europa ha tenido mucho que ver en ese camino. Hoy es un país próspero y abierto, con un tejido productivo moderno y un estado de bienestar de los más avanzados del mundo. También es un país más igualitario. España ha dejado atrás su aislamiento y es hoy un país abierto al mundo, solidario, con una voz fuerte y un gran respeto por su capacidad de acogida e integración y el compromiso con los derechos humanos».
[–>[–>[–>
«La monarquía parlamentaria ha garantizado a España medio siglo de libertad, estabilidad y prosperidad. La Corona ha sido un pilar de unidad y de confianza democrática para todos los españoles».
[–>[–>[–>
«España ha afrontado una transformación ejemplar en estos 50 años que han permitido alcanzar altas cotas de bienestar social gracias a la implantación y sustento de los servicios públicos. En este tiempo actual tan controvertido en el ámbito internacional por según qué discursos regresivos, es bueno parar un momento para poner en valor los 50 años de sistema democrático y ver cómo seguir avanzando los próximos cincuenta».
[–>[–>[–>
«La Corona es el paraguas institucional y constitucional de nuestra democracia. Símbolo de la unidad y de los derechos de todos los españoles. Además, es ancla de moderación frente a intereses partidistas y el mejor embajador internacional de nuestras empresas».
[–>[–>[–>
«España es una democracia consolidada, de las más robustas del mundo. Con una progresión estos últimos 50 años muy positiva, plenamente ubicada en el ámbito geopolítico europeo, una sociedad moderna, abierta, una economía que hoy genera prosperidad, que está funcionando bien. El reto de la reducción de desigualdades es un reto importante, pero veo un país moderno de valores europeos y la evolución estos 50 años ha estado con carácter general positiva. Catalunya ha contribuido de manera decisiva a la convivencia democrática, a la pluralidad, a la recuperación de las instituciones y a generar prosperidad. Y quiere continuar haciéndolo con un liderazgo solidario».
[–>[–>[–>
«La monarquía parlamentaria es un pilar básico e irrenunciable de nuestra democracia, la garantía de la libertad que disfrutamos y de la mejor etapa de la Historia reciente de España. Los reyes Juan Carlos I y Felipe VI demostraron la noche del 23F y tras el 1-0 el papel esencial de una Corona al servicio de la ley de leyes, que nos representa a todos los españoles en la unidad y la estabilidad nacional»
[–>[–>[–>
«Salta a la vista que han supuesto 50 años de democracia: el período más largo de democracia que hemos conocido y, con sus muchísimos problemas, el mejor de la historia moderna de España. Esto no es triunfalismo, una actitud que me repugna; tampoco es una opinión: es un hecho. Aquí es donde estamos, y, si no sabes donde estás, no puedes ir a ninguna parte».
[–>[–>[–>
«Un avance para la sociedad que lo será aún más, dado que la próxima monarca será una mujer la que nos represente a todos los españoles».
[–>[–>[–>
«En España y en aquellos otros países donde también existe, la monarquía parlamentaria se ha acreditado como un referente de estabilidad y excelencia democrática. Los reyes han dejado de ser señores absolutos para convertirse en símbolos de todo aquello que nos hermana y nos invita a actuar con la mayor exigencia ética. A los españoles nos ha ido muy bien con la institución monárquica; si don Juan Carlos supo liderar en su día el cambio que España ansiaba hacia una sociedad plenamente democrática, don Felipe ha sabido dar respuesta a la demanda de ejemplaridad pública que los españoles pedían en el momento de su acceso al trono. Por encima de todo y ante la epidemia de populismo y radicalidad que padecemos, la figura de Felipe VI se perfila como el espejo donde mirar cuando los ciudadanos buscan respeto y neutralidad institucional, ejemplo de compromiso con el servicio público y un comportamiento personal y familiar irreprochable».
[–>[–>[–>
«Es importante valorar los 50 años de democracia en el marco de una monarquía parlamentaria, especialmente teniendo en cuenta que la Constitución establece para la Corona un papel estrictamente representativo, sin competencias ejecutivas. Los avances sociales y derechos de los que hoy disfrutamos han sido conquistados gracias al esfuerzo de las clases populares y a la participación ciudadana. Derechos como el aborto y el divorcio, el reconocimiento y la lucha contra la violencia machista, así como el acceso universal a la sanidad y a la educación, son fruto directo del ejercicio democrático, del poder del voto y de la capacidad de organización de la sociedad.
La reforma laboral ha supuesto un hito en la recuperación de los derechos de las personas trabajadoras, así como la reforma de pensiones, que garantiza tanto el presente como el futuro de un sistema público y justo.
La llegada de las 40 horas de trabajo a la semana fue una lucha en la que UGT desempeñó un papel clave. Este logro, resultado de una larga lucha sindical, se consagró como uno de los mayores avances en materia de conciliación laboral, y ha marcado el camino de otros grandes cambios. Por ejemplo, los salarios, que son pilar para este sindicato, no han cesado en su subida. El SMI ha sido prueba de ello, que ahora se sitúa en 1.184 euros brutos mensuales.
Aunque aún queda camino por recorrer, estos logros reflejan la fortaleza y madurez de nuestra democracia».
[–>[–>[–>
“La monarquía encarna la unidad y la permanencia de España. Esa ha de ser su única misión. Ni menos, ni más».
[–>[–>[–>
«Más allá de las legítimas discrepancias sobre dimensiones concretas del balance de este medio siglo, tal vez exageradas por la áspera confrontación política de los últimos tiempos, hay una amplia coincidencia en que se ha producido un claro progreso económico y social, y de avance en derechos para la ciudadanía de nuestro país. Y esto es lo más relevante para extraer la voluntad de que la democracia española siga siendo un promesa abierta a nuevos valores y desarrollos que enriquezcan nuestro proyecto común de convivencia».
[–>[–>[–>
Juan Carlos I jugó un papel fundamental en el golpe de estado del 23F, aunque años más tarde defraudó con sus escándalos personales y financieros. Ha sido una monarquía hilada en la trastienda por nombres que quedarán para la historia como Sabino Fernández Campos, Fernando de Almansa, Alberto Aza, Rafael Spottorno, Jaime Alfonsín…
Tras su abdicación en 2014, el rey Felipe y la reina Letizia han hecho de la transparencia, los valores y la profesionalidad su bandera, representando a España como los mejores embajadores de nuestro país. No se puede comprender la historia reciente de España sin el papel que ha desarrollado la Monarquía en los buenos, pero también en los malos momentos.
[–>[–>[–>
«Los 50 años han aportado perspectiva suficiente para cuestionar si es la forma de Estado más adecuada. La figura de Juan Carlos I, controvertida, ha sido determinante para la institución, sumida en una profunda crisis durante años. Las fechorías del emérito y sus supuestas corruptelas, imposibles de juzgar por una interpretación a nuestro juicio equivocada de la inviolabilidad que le confiere la Constitución, evidenciaron las costuras de un sistema que protegía en exceso su jefe de Estado y que, por otra parte, abdicó mucho antes de su función de arbitrar y moderar. El futuro sigue siendo incierto para la institución a pesar de los esfuerzos de modernización que ha hecho Felipe VI, que más allá del salto generacional no ha aportado grandes novedades, como demostró en el discurso pronunciado el 3 de octubre de 2017».
[–>[–>[–>
«La monarquía parlamentaria ha impulsado la estabilidad institucional, la apertura y el progreso de España, consolidando un sistema democrático sólido y reforzando la calidad de nuestras instituciones. Ha sido un tiempo transformador que nos ha convertido en un país moderno, cohesionado en nuestra pluralidad y plenamente integrado en el contexto internacional, con una clara vocación europeísta. En este camino, el sector bancario, como uno de los pilares del sistema económico, ha acompañado y facilitado esta evolución, contribuyendo activamente al desarrollo económico, la cohesión social y la formación, siempre al lado de familias y empresas. Hoy el sector bancario español es una referencia mundial que contribuye también a ampliar la presencia de España en la esfera internacional».
[–>[–>[–>
«Una sociedad dueña de su presente y que solo se debe a sí misma, autocrítica y capaz de juzgar el desempeño de todas las instituciones, incluida la monarquía. La idea de España como suma de identidades, la reanudación del proyecto de país que vio la luz en el 31 y la recuperación de nuestra condición europea, con los valores y las libertades que a Europa le son propias».
[–>[–>[–>
«Un cambio para nuestra sociedad, todavía relativamente nuevo, que ha propiciado una normalización y un gran avance para España».
[–>[–>[–>
«La llegada de la monarquía constitucional a España fue un punto clave para avanzar hacia la democracia y las libertades que tenemos hoy. Ayudó a dejar atrás etapas oscuras y sentó las bases de un sistema político más abierto, plural y respetuoso con los derechos de todos, con derecho a tener futuro. La monarquía fue esencial para construir la convivencia democrática actual».
[–>[–>[–>
«La monarquía parlamentaria ha aportado estabilidad y ha contribuido a fortalecer las instituciones democráticas. Como institución, la Corona ha cumplido escrupulosamente su función constitucional de neutralidad, dando ejemplo de cómo una institución debe ser permanente fiel al mandato constitucional.
Estos 50 años representan una clara ruptura con los claroscuros (o, directamente, las sombras) de la historia de la monarquía en España, y nos han situado en el tiempo histórico de los países democráticos que tienen, como nosotros, monarquías como jefaturas de Estado».
[–>[–>[–>
“El 22 de noviembre de 1975 no tuvo lugar una simple sucesión en la Jefatura del Estado; la proclamación de don Juan Carlos inició la Transición, es decir, la restitución de la soberanía a su legítimo dueño, el pueblo español. La Corona fue decisiva a la hora de devolver España a los españoles y sentar las bases de la democracia. En España convivencia democrática y monarquía son y serán realidades sinónimas”.
[–>[–>[–>
«No cabe duda de que la monarquía jugó, durante la Transición y especialmente en los primeros años, un papel clave como aglutinador de fuerzas políticas, desde Alianza Popular al Partido Comunista. Además creo que España consiguió una mayor relevancia y un mayor respeto internacional gracias a la monarquía».
[–>[–>[–>
«Se cumplen 50 años desde que se reinstauró la monarquía de la mano de Juan Carlos I, que posibilitó la llegada de la democracia a España. Se abrió así un período de modernidad y prosperidad al que contribuyeron, de manera decisiva y generosa, políticos, dirigentes y demás sectores de la sociedad. Todos unidos para conseguir un claro objetivo: la consolidación del sistema democrático, así como de los derechos y libertades recogidos en la Constitución Española de 1978.
En estas cinco décadas, España, en un claro afán de superación, ha podido avanzar de manera sobresaliente, alcanzando las mayores cuotas de modernidad y progreso que nunca antes había conocido en la historia. Hoy, con una monarquía asentada y ejemplar al frente de la cual está el rey Felipe VI, España es una de las grandes potencias económicas, sociales, culturales y democráticas del mundo. Y estoy seguro de que este camino lo continuará en el futuro, con gran acierto y determinación, la Princesa de Asturias».
[–>[–>[–>
«A mi juicio, la monarquía parlamentaria ha aportado estabilidad y neutralidad a lo largo de los años y los sucesivos gobiernos. Ha sido una herramienta útil y eficaz en momentos difíciles. Ahora, la figura de Felipe VI robustece a la institución y garantiza, en mi opinión, la continuidad de una forma de Estado que, en un país como el nuestro, nos vacuna de ciertas veleidades partidistas que sólo profundizan en la polarización».
[–>[–>[–>
«En 50 años de democracia España ha modernizado notablemente su estructura social, es un país más libre y más igualitario.
La previsión constitucional del estado social ha cristalizado en unos niveles de bienestar desconocidos, si bien el modelo debe ser reforzado en un momento en el que la amenaza civilizatoria a los estados de derecho es patente.
Pese a la mejora material de la vida de las mayorías sociales, en estos 50 años no hemos sido capaces de resolver del todo problemas endémicos de nuestra estructura económica, lo que se ha reflejado en tasas de desempleo y bajos salarios. Hoy España tiene una oportunidad inédita para modificar esos parámetros»
[–>[–>[–>
«La monarquía ha tenido un papel fundamental en la estabilidad y la cohesión de nuestro país, bases de la mayor etapa de prosperidad de nuestra historia. Un legado que, además, perdura con plena vigencia en la figura del Rey Felipe VI: su firme defensa del marco constitucional y la convivencia democrática, su vocación de servicio público, su capacidad para conectar con todas las generaciones y sensibilidades, junto con su impulso a la innovación y la sostenibilidad consolidan a la monarquía como una institución clave en un mundo que encara grandes transformaciones».
[–>[–>[–>
«Si se miran estos 50 años con perspectiva histórica, es imposible dejar de reconocer el papel fundamental que la monarquía ha desempeñado en la transformación de nuestro país. Durante la Transición se repitió mucho una frase, que creo acuñó Areilza, que definía al rey como ‘el motor del cambio’, fue una frase que respondía a la verdad. El protagonista de la Transición, un proceso en muchos sentidos ejemplar, fue el pueblo español, pero el papel de la monarquía y del rey Juan Carlos en particular fue decisivo para su éxito. Ya vigente la Constitución del 78, tanto el rey Juan Carlos como Felipe VI han ejercido el poder moderador que la Constitución les atribuye de manera impecable, otros poderes del Estado harían bien en emularlos al ejercer los suyos».
[–>[–>[–>
«La monarquía fue uno de los mecanismos que definió el tipo de transición que tuvimos en España, al simbolizar la continuidad de la jefatura del Estado en la figura que eligió el dictador Franco. La corrupción de la monarquía no fue una particularidad de Juan Carlos sino una característica definitoria del funcionamiento de las oligarquías en España. La monarquía sigue siendo eso: un poder no democrático en el que se referencia la gran empresa y lo más conservador del aparato del Estado».
[–>[–>[–>
«Cincuenta años, cinco décadas, dan cabida a muchas realidades y sensaciones. Esperanza, optimismo, admiración incluso. Estupor y desconcierto también. En estos días, no obstante, las perspectivas vuelven a ser favorables, ganadas a pulso con seriedad, compromiso y sentido común. La senda se percibe luminosa, y eso es muy de agradecer».
[–>[–>[–>
«En estos 50 años, la monarquía española no ha querido entender nunca la diversidad del Estado y ha trabajado activamente contra el sentir general de Catalunya —como evidenció el rey Felipe VI con su lamentable discurso del 3 de octubre—. Que Franco designara como su sucesor al rey Juan Carlos, inhabilitó democráticamente la Corona desde el mismo día de su restauración, y la condiciona todavía hoy. Hoy, cuando la ciudadanía exige más igualdad y diversidad, más profundidad democrática y transparencia, mantener una institución hereditaria, arcaica, obsoleta y opaca, es incomprensible».
[–>[–>[–>
«Creo que la monarquía parlamentaria ha sido extremadamente útil durante las primeras décadas de la Transición porque aportaba estabilidad y permitió al país centrarse en temas más urgentes. Pero también creo que hace tiempo que el sistema monárquico hubiera debido ser legitimado (o rechazado) por medio de un referéndum».
[–>[–>[–>
«La monarquía ayudó a hacer posible la Transición y el establecimiento de un sistema democrático. Esto abrió el periodo más largo de nuestra historia de paz, libertad y progreso social. Estos 50 años han significado la modernización y descentralización del Estado, el desarrollo de los derechos civiles, económicos y sociales y nuestra integración en Europa y en la comunidad internacional. Quedan todavía asignaturas pendientes».
[–>[–>[–>
“El reinado de Juan Carlos I ha sido magnífico para España. Otra cosa es que su vida particular haya tenido fallos, como los tenemos todos pero haber pasado de la dictadura a la democracia, de la concentración que tenía en sus manos de todos los poderes, el ejecutivo, el legislativo y el judicial, pasárselo todos al pueblo durante la Constitución del 78 ha sido importantísimo. Además, ha ayudado mucho a internacionalizar las empresas españolas y ha llevado la imagen de España por todo el mundo. La vida personal no hay quien aguante tantísimos años expuesto de esa manera».
[–>[–>[–>
«Durante los últimos 50 años hemos vivido una de las etapas mas importantes de nuestra historia: España, un país tan complejo y diverso, es un país democrático y garante de las libertades ciudadanas. Es un país europeísta, moderno y solidario mas allá de nuestras fronteras. Decirlo ahora es fácil, conseguirlo fue difícil»
[–>[–>[–>
«El camino recorrido desde una dictadura a una democracia. Pasar de la condición de súbditos a la de ciudadanos. Transitar de un poder centralizado a un traspaso de parte de ese poder a los distintos territorios que conforman España. Circular sin el freno de mano que impuso el franquismo a los hechos diferenciales que conviven en España».
[–>[–>[–>
«Han sido 50 años de continuidad en las estructuras de poder».
[–>[–>[–>
«Desde la aprobación de la Constitución, donde en el artículo 3 se define a España como una monarquía parlamentaria, nuestro país ha vivido la mejor etapa de su historia en el siglo XX y la mejor que llevamos vivida en el siglo XXI. Don Juan Carlos entendió que su supervivencia como rey dependía de apostar por la puesta en marcha de un Estado democrático. Y fue lo que hizo renunciando a ser un apéndice de Franco».
[–>[–>[–>
«La monarquía supuso en España una garantía de permanencia para amplios sectores de la dictadura, que vieron cómo el jefe de Estado designado por Francisco Franco, Juan Carlos I, ocupaba su lugar en lo más alto. La impunidad de aquellas élites se arrastra hasta nuestros días. Con su abdicación y posterior proclamación de Felipe VI, quedó además institucionalizada la prevalencia del varón sobre la mujer para ocupar la Corona, en principio la más alta institución española».
[–>[–>[–>
«Estos 50 años han sido los mejores de la España moderna. Han supuesto la consolidación de un sistema democrático, la estabilidad política y un gran desarrollo económico. Y todo ello con una monarquía parlamentaria que fue la condición necesaria para transitar desde la tiranía a la libertad sin ira y en paz».
[–>[–>[–>
«Los avances sociales y económicos de los últimos 50 años no hubieran sido posibles sin la consolidación de nuestras instituciones democráticas. La monarquía parlamentaria ha sido durante ese periodo la clave de bóveda del proyecto nacional de convivencia construido entre todos los españoles.
La figura del Rey, que según la Constitución simboliza la unidad y permanencia de España y árbitra y modera, ha sido fundamental en la correcta resolución de situaciones vividas en nuestra historia reciente, véase el intento del golpe de estado del 23 de febrero de 1981, o la iniciativa secesionista de la Generalitat de Cataluña de octubre de 2017″.
[–>[–>[–>
«Estos 50 años representaron, al comienzo, una gran esperanza de normalización, de modernización y de democracia. Después vino una fase de consolidación de esta trayectoria, especialmente vinculada a la integración de España a las instituciones europeas. Y finalmente, hemos vivido y estamos viviendo, especialmente desde una óptica catalana, una decepción creciente y una percepción de degradación de las principales instituciones del Estado, del estado de derecho, y del sistema democrático».
[–>[–>[–>
«Ha sido una aportación extraordinaria, excelente. Todos hemos cometido errores, ha habido situaciones difíciles pero, en conjunto, si a mis 30 años me hubieran dicho que me esperaban estos 50 años, habría sido una satisfacción enorme. Yo no me esperaba que todo fuera tan bien».
[–>[–>[–>
«Felipe VI y Letizia han sabido leer bien las demandas del país y han prestado servicios importantes a la nación, en unos tiempos muy cambiantes y complicados. Representan a España, son una suerte de altos funcionarios del Estado con la envoltura propia de la monarquía, pero que están a la altura de las exigencias de la ciudadanía y de la política democrática de este siglo».
[–>[–>[–>
«La monarquía es algo anacrónico, pero tenemos ejemplos de monarquías como en los países nórdicos, que supuestamente son muy avanzados, que funcionan bien. No tenemos tradición republicana aquí. Mis expectativas es que tal como está el clima político los actuales reyes dan un cierto clima de templanza en esta tensión. Por ejemplo, en el funeral de la dana eran personas de consenso y ahora mismo se echa en falta el consenso en general. Nos habíamos creído que habíamos conquistado las libertades, pero el tema de las libertades es como la salud. Si no la cuidas, se pone mala y entonces tenemos problemas. Me asusta ver niños de 17 años cantando el ‘Cara al Sol’ cuando no tenían ni idea de lo que significa esa canción y a mí me detenían por la calle cuando tenía esa edad».
[–>[–>[–>
«Estos 50 años han sido un éxito gracias al esfuerzo de todos: desde la figura principal del rey Juan Carlos hasta a muchos políticos que le acompañaron en el proceso, como Santiago Carrillo, Manuel Fraga, Felipe González y Miquel Roca. Ellos sentaron las bases de libertades para la democracia que gozamos hoy en día».
[–>[–>[–>
Opiniones recabadas por las áreas de Política, Cultura, Economía, Deportes y Entender más de EL PERIÓDICO.
[–>[–>[–>
Suscríbete para seguir leyendo
Puedes consultar la fuente de este artículo aquí