¿Por qué la iglesia de la Laboral lleva cerrada desde 2020? Urgen al Principado su reapertura
Tras una obra que se proyectó en 2017, un cierre provisional en 2020 justo antes de la pandemia, cinco licitaciones y cuatro de ellas fallidas y una actuación para corregir las deficiencias de su imponente cúpula, la iglesia de la Universidad Laboral sigue, a grandes rasgos para los visitantes, como estaba. Es decir, cerrada y sin fecha prevista para su reapertura casi cinco meses después de que terminaran los trabajos. Así lo reconocen fuentes de la Consejería de Cultura tras una consulta de LA NUEVA ESPAÑA esta semana. La situación pone en alerta a la Asociación de Antiguos Alumnos de la Universidad Laboral, que urge a encontrar una fecha. Incluso advierten de que están ya cayendo tejas al suelo. «No comprendemos por qué ha pasado tanto tiempo», explica el presidente de la asociación, Manuel Nevares.
La reforma de la cúpula de la iglesia de la Universidad Laboral es un asunto que lleva coleando en la esfera del patrimonio cultural gijonés desde el 2017. Fue ese año cuando se planteó el primer proyecto para arreglar un templo que, como casi todo en el complejo de Luis Moya, es único en el planeta, ya que se trata de la iglesia con planta elíptica más grande del mundo. La primera licitación de la obra para corregir las deficiencias de la cúpula, que sufría fisuras, grietas, filtraciones y pequeños hundimientos, se puso en marcha en 2020. En enero de ese año, se procedió al cierre provisional de un templo desacralizado desde hace tiempo, para evitar cualquier tipo de accidente. Una previsión a la baja de la inversión necesaria para los arreglos hizo que la obra saliera a concurso hasta en cuatro ocasiones, hasta que a la quinta fue la vencida.
Los arreglos de la cúpula se encargaron a la empresa Citanias. Fue necesario, por diferentes cuestiones, ampliar el plazo de la obra. El templo quedó durante varios meses recubierto por un basto andamiaje tanto por dentro como por fuera. Se calculó que se utilizaron tantos andamios como el número total de estos hay en Asturias. Fue hacia septiembre del año pasado, cuando se colocó la cruz que corona la linterna de la cúpula, así como la enorme Cruz de la Victoria de la fachada principal, que se dieron por finalizados los trabajos. Por tanto, cinco meses después, y ya sin andamios ni operarios, el Principado sigue sin encontrar fecha para reabrir el templo.
La carrera por ser Patrimonio Mundial de la Humanidad
Este nuevo contratiempo llega en un momento clave de las aspiraciones de la Universidad Laboral para ser declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. El complejo de Luis Moya fue incluido en enero de este año por el Ministerio de Cultura en lo que se conoce como la «lista indicativa». Se trata del inventario de bienes del país susceptibles de ser Patrimonio Mundial en el futuro. A ello alude Manuel Nevares. «Estamos esperando que nos citen, porque tras ser incluidos en esa lista el tiempo corre y nosotros podemos aportar mucho», valora.
«La iglesia de la Laboral es una pieza única. Y es innegable que forma parte de la historia», añade el presidente de la asociación, que también reclama el inventario de bienes muebles ante el temor de que falten algunos bancos del templo, bancos especialmente diseñados para la iglesia. El secretario de la Asociación de Antiguos Alumnos, Jesús Jiménez, también se pronunció al respecto. «Hemos preguntado muchas veces por la reapertura y lo que se nos ha dicho es que estaban limpiando. Es algo que no entendemos, porque estamos hablando de casi seis meses desde el final de las obras», cuenta Jiménez, que alerta de que recientemente han caído algunas tejas de la cúpula.
UNA Obra Planada Desde el Año 2017 y Con Varios Fracasos
Suscríbete para continuar leyendo
Puedes consultar la fuente de este artículo aquí