Ni el caso Nóos, ni el enorme daño que supuso a la reputación de la Casa Real. Juan Carlos I sólo tiene un reproche a Iñaki Urdangarin: la ruptura de su matrimonio con la infanta Cristina. ‘Reconciliación‘, el libro de sus memorias, llegará el 5 de diciembre a España de la mano de Planeta, aunque este miércoles sale a la venta en Francia, y laSexta ha tenido acceso a la obra. En el libro, el monarca critica que el ex duque de Palma «fuese con otra mujer» cuando salió de prisión tras cumplir condena a pesar de que la princesa le visitó en prisión.

Unos reproches que demuestran el doble rasero del emérito, que critica a Iñaki Urdangarin por dejar de lado a su mujer en el mismo libro en el que admite que mantuvo relaciones extramatrimoniales. Relaciones que él define como «deslices sentimentales».

En ‘Reconciliación’, el emérito reconoce sólo dos infidelidades y habla como nunca antes habíamos visto de la reina Sofía, con quien se casó en 1962. «Nada cambiará mis sentimientos profundos hacia mi esposa, Sofi, mi reina, ni siquiera unos deslices», confiesa.

En cuanto a lo que llama «despiés», el rey emérito ha sido muy contundente en esta biografía: «Los medios de comunicación me han atribuido una decena de relaciones extramatrimoniales. La mayoría completamente ficticias», afirma, recordando que le han atribuido una relación falsa con Lady Di, de la que dice era «distante y taciturna».

Pero reconoce dos y lamenta especialmente uno: «He tenido dos deslices sentimentales. Una relación en particular se hizo pública. Fue hábilmente explotada y tuvo graves consecuencias para mi reinado», afirma.

«Aquella relación fue un error del que lamento amargamente. Puede parecer banal, pero hombres y mujeres han estado ciegos hasta el punto de no ver lo evidente», añade señalando a la empresaria alemana Corinna Larsen, aunque en ningún momento la nombra.

Juan Carlos asegura que quería «justicia» en el caso Nóos

Sobre Urdangarin y su condena por corrupción en el marco del caso Nóos, Juan Carlos I asegura que el exmarido de la infanta Cristina se metió en líos «por ingenuidad y probablemente por levedad», ya que «da su confianza» a Diego Torres y «firma sin rechistar todos los papeles que le pide». Sin embargo, sostiene que el daño que este juicio hizo a su reinado fue irreparable, ya que fue «el cataclismo para el que nadie estaba preparado».

Al respecto, el exjefe del Estado dice que intentó ayudar a Urdangarin buscándole un abogado, ya que su situación procesal «afectaba mucho» a su hija. Sin embargo, defiende que el entonces duque de Palma «no recibió ningún trato de favor» y que, sobre todo, quería que se hiciera «justicia», como dijo en su último mensaje navideño, en la Nochebuena de 2013. Sin embargo, denuncia que se vulneró la presunción de inocencia de Urdangarin y Cristina de Borbón.

Reproche a Felipe VI por actuar contra Cristina

El caso Nóos tuvo un importante impacto en la Familia Real, tanto a nivel institucional como personal. Con su llegada a la Jefatura del Estado en 2014, Felipe VI relegó a Cristina a un segundo plano, retirándole sus derechos dinásticos justo cuando cumplía 50 años. Juan Carlos asegura que la infanta estaba dispuesta a renunciar a sus privilegios, pero «no esperaba tal regalo de cumpleaños por parte de su hermano».

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