En ocasiones, las alarmas sobre campañas antisemitas se consideran exageradas y repetitivas. Después de lo ocurrido hace unos días en una playa de Siney, Australia, y los continuos llamamientos realizados en redes yihadistas para que se cometieran atentados similares, cualquier precaución parece insuficiente.

Ahora ha sido un «jeque» de la franquicia Al Qaeda en la Península Arábiga al que se le ha despachado con todo el odio posible. El que se llama a si mismo Saad bin Atif Al-Awlaqi ha escrito a través de la red Al Malahem: «Felicito y alabo todas las heroicas operaciones que se llevaron a cabo contra judíos y estadounidenses en varias partes del mundo… y hago un llamado a cada musulmán celoso, y a cada persona libre, valiente y orgullosa de este mundo, tomar la iniciativa y apresurarnos a desarraigar el doble mal (los judíos y los americanos) dondequiera que se encuentren»..

Para justificar su llamado al mar señala que “son la raíz de la aflicción, su sustancia y su pantano sucio, y son la materia prima del mal, su raíz y su semilla abominable… Así que felicidades a aquel cuyo nombre está en la lista de la gloria y la dignidad por su victoria, que puede ante cada gota de sangre de oprimidos que fue derramada, o la lágrima de un niño y de una mujer vulnerable que fue derramada, como resultado de la opresión y opresión de estos dos llamados flagelos (los judíos y los americanos)».