El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, reapareció este martes en el programa Espejo Público de Antena 3, donde volvió a defender su versión del beso con Jenni Hermoso Después de la final del Mundial de 2023, negó informes sobre su vida en República Dominicana y culpó al actual gobierno y el manejo del asunto.

«Es falso que vivía en República Dominicana en una lujosa mansión, compartía un departamento de 60 metros cuadrados. Las autoridades fiscales lo negaron, pero no aparece en los medios. Esta mansión la alquilaron unos amigos míos por 20 días», dijo Rubiales, desmintiendo las noticias que hablaban de un supuesto estilo de vida ostentoso durante su estancia en el país caribeño.

“No me comparen con Pedro Sánchez”

Durante la entrevista, Rubiales se desmarcó del presidente del Gobierno y criticó duramente su gestión política: «No soy una persona victimista, no me comparen con Pedro Sánchez. Nunca hemos sido amigos, hemos intercambiado mensajes. No quiero que me comparen con alguien que prometió no amnistía y luego lo cumplió. Es un mal español. El PSOE que yo conocí no es el actual. No puede haber ninguna relación», afirmó.

“Tenemos miedo a la agresión”

El exdirigente de la RFEF también habló del episodio en el que su tío Luis Rubén Rubiales le tiró varios huevosasegurando que no sabía que el autor era su familiar: «Teníamos miedo del ataque, pero no sabía que era mi tío. Pensé que estaba armado. No voy a hablar de los familiares, todos son el juez, yo me defendí de un ataque. Habría intentado detenerlo, porque había niños pequeños y una mujer embarazada. Es una pena que duden», explicó.

«No le voy a pedir perdón a Jenni Hermoso»

Rubiales reafirmó que no pediría disculpas a la jugadora por el beso dado durante la celebración del Mundial femenino: «No le voy a pedir disculpas a Jenni Hermoso, se lo pedí y me dijo ‘vale’. La sentencia no es firme, no está fundada, no fue un beso con espíritu libidinoso sino un beso de alegría como el que le puedes dar a un ganador de la lotería cuando gana 10 millones de euros. Mucha gente en este país considera desproporcionado ese beso». Es un delito”, argumentó.

El expresidente también reconoció errores en su comportamiento, aunque los distinguió de cualquier delito: «Me equivoqué dos veces, en la caja y en el beso. Pedí disculpas institucionalmente en mi discurso, pero sé lo que hice. Una cosa es comportarme de manera inapropiada y otra pedirle perdón a Jenni Hermoso cuando le pedí permiso en un contexto de celebración total», afirmó.

“Querían la cabeza de Jorge Vilda”

Rubiales también habló sobre la destitución del ex entrenador Jorge Vilda, a quien defendió durante la crisis interna de la selección femenina: «Querían la cabeza de Jorge Vilda. No podemos despedirlo porque en su club hacían lo mismo. Yo lo defendí y en ese momento vieron la oportunidad de oponerse a mí. Ganaron el Mundial gracias a su calidad, pero antes no lo ganaron porque no tenían los medios. Se hicieron muchas cosas, pero eso no justifica que yo esté mal, pero a nivel institucional, no a ningún otro nivel”, concluyó.

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