ZARAGOZA, 14 dic (EUROPA PRESS)-

Este pasado jueves 11 de diciembre, la Policía Nacional detuvo en Zaragoza a una mujer presuntamente responsable de más de quince hurtos de joyas y dinero superiores a los 40.000 euros en las viviendas donde trabajaba como asistente y que ya fue detenida por hechos similares en 2017.

De momento se han recibido denuncias de tres familias que contaron con los servicios de asistencia del detenido, que en algunos de los casos llevaban trabajando más de dos años bajo la total confianza de los propietarios de las viviendas, y los investigadores no descartan que pueda haber más víctimas que aún no hayan presentado denuncia.

En total, se le imputan dieciséis delitos de hurto con los que presuntamente se apropió de más de 40.000 euros en joyas. La primera víctima que notó la ausencia de algunas de sus joyas y sospechó del asistente dio la alarma a los demás denunciantes, ya que eran conocidos y habían conseguido los servicios del detenido tras recomendarse mutuamente.

Las tres familias denunciaron el robo de las joyas e identificaron al asistente como sospechoso, hecho que los investigadores pudieron comprobar al comprobar la gran cantidad de joyas vendidas por el detenido en comercios especializados en la compra de oro. Las víctimas, a pesar de reconocer las joyas vendidas por los acusados, no pudieron recuperarlas ya que todas ellas habían sido fundidas una vez transcurrido el tiempo que la legislación exige su conservación.

Se da la circunstancia de que la mujer detenida el pasado 11 de diciembre ya había sido detenida en 2017 por su participación en hechos similares en otros domicilios donde trabajaba en ese momento.

A primera hora de la tarde del pasado viernes día 12, la detenida fue trasladada al juzgado de instrucción en turno de guardia y tras ser escuchada declaración fue puesta en libertad.