El Gobierno planea que Telefónica compre una parte de Indra y sustituir ya a Pallete por Murtra
El Gobierno maniobra para crear uno campeón nacional de las telecomunicaciones y las tecnologías. Moncloa prepara una operación de calado en el panorama empresarial española y planea que Telefónica un gran movimiento corporativo con Indra. El Estado, a través de SEPI, tiene posiciones accionariales de peso en ambos grupos (con un 10% en Telefónica tras el plan para contrarrestar la entrada de Arabia Saudí en la teleco y del 28% en Indra como parte de su objetivo de impulsar el papel español en el sector de la defensa).
[–>[–>[–>[–>Los planes del Ejecutivo pasan por que Telefónica tome el control de todo o parte de la filial tecnológica de Indra, Minsait. Indra tiene ya activada la venta del negocio de pagos de Minsait, pero no consigue un comprador al precio que desea (de entre 500 y 600 millones de euros) y también había dejado la puerta abierta a dar entrada a socios en su accionariado del conjunto de la filial tecnológica como parte de su plan estratégico.
[–>Entre otras opciones también se ha estudiado la posibilidad de una operación total y que Telefonica comprara íntegramente Indra, pero eso supondría un problema estratégico para los intereses españoles por los planes de crecimiento de la compañía en el sector de defensa y la presencia actual de Arabia Saudí como gran accionista de Telefónica. Telefónica, que lleva años pasando un periodo de grisura en bolsa, acumula una capitalización de unos 22.500 millones de euros, siete veces más que la valoración actual de Indra, con menos de 3.200 millones.
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Relevo de Álvarez-Pallete
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A la espera de la operación, el Gobierno impulsará ya la salida del presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, y su sustitución previsiblemente por el actual presidente de Indra, Marc Murtra, con línea directa con el Ejecutivo y vinculado al PSC, según apuntan varias fuentes cercanas al movimiento. El relevo de Pallete al frente de la teleco -adelantado por El Confidencial- podría ser inminente con la convocatoria de un consejo de administración extraordinario urgente este mismo fin de semana.
[–>[–>[–>[–>[–>[–>[–>El gran movimiento empresarial y el cambio en la cúpula de Telefónica contarían con el respaldo de Criteria, el brazo inversor de la Fundación La Caixa y que también cuenta con un paquete del 10% en la teleco. Tanto Álvarez-Pallete como Marc Murtra son miembros del patronato de la Fundación LaCaixa, presidido por Isidro Fainé. Criteria ha venido ejerciendo un papel fundamental para blindar empresas que se consideran estratégicas para la economía nacional, como Telefónica o Naturgy.
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Álvarez-Pallete es el primer ejecutivo de Telefónica desde hace ocho años, desde que en abril de 2016 sucedió en el cargo a César Alierta, pero ha permanecido en el grupo en diferentes cargos nacionales e internacionales desde hace 25 años. Pallete también ostenta desde 2022 la presidencia de la GSMA, la patronal mundial de la industria móvil que engloba a los mayores grupos de telecomunicaciones e industrias afines del mundo y organizadora del Mobile World Congress (MWC) de Barcelona, un puesto este último para el cual fue renovado hasta 2026 el pasado octubre.
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Terremoto accionarial
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Telefónica ha hecho frente durante el último año a un auténtico terremoto accionarial. Arabia Saudí anunció en septiembre de 2023 su irrupción inesperada en el capital de la teleco y su intención de convertirse en su mayor accionista, lo que desató otros movimientos que han acabado por revolucionar la gobernanza de la teleco y que ahora derivarán en un cambio en lo más alto de la cúpula directiva. Saudí Telecom compró un 4,9% de la compañía en participaciones directivas y otro 5% en derivados financieros, y pidió permiso al Gobierno para poder elevar su presencia hasta el 9,9%, y ya ha recibido el permiso del Ejecutivo. Tras la entrada de Arabia, el Gobierno reaccionó con la compra de un 10% de Telefónica a través de SEPI, lo que suponía el regreso del Estado español a la teleco un cuarto de siglo después de su privatización total, y Criteria elevó su presencia también hasta el 10%.
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Telefónica ya afrontaba hasta ahora la necesidad de acelerar cambios en su consejo de administración tras el repentino fallecimiento en diciembre de Javier Echenique, que era vicepresidente de la teleco y consejero independiente. El inesperado deceso obligaba ya a anticipar movimientos que la compañía iba a tener que encarar a la espera de que Saudi Telecom (STC) traslade oficialmente su petición de tener representación en el consejo. La operadora árabe tendrá derecho a contar con un representante en el consejo de administración del grupo español cuando supere la participación mínima que se lo permite (del 6,7%).
[–>[–>[–>[–>El fallecimiento de Echenique dejó una vacante en el consejo de Telefónica en un momento clave. El grupo ya iba a tener que encarar una reorganización del órgano de gobierno cuando llegara la petición de entrar de STC. En principio, se daba por hecho se propondría la sustitución de uno de los consejeros independientes o del único que tiene la condición especial de “otros externos” (Javier de Paz, un hombre con línea directa con Moncloa) para dar entrada al nuevo consejero dominical en representación de la compañía de Arabia Saudí.
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Es previsible que tenga que haber más relevos, con alguna otra salida, para poder nombrar a una nueva consejera que permita reequilibrar la composición con mayor presencia femenina para cumplir con las obligaciones de la Ley de Paridad, dado que es más que previsible que STC proponga un hombre como consejero. Actualmente cinco de los quince miembros del consejo son mujeres, un 33% frente al 40% que requieren la normativa.
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Desde Telefónica se reconocía que, a la espera de la petición formal de Saudi Telecom, la compañía ya tenía diseñado su plan de renovación del consejo por el largo tiempo transcurrido desde el desembarco en el accionariado del nuevo socio. El repentino fallecimiento de Echenique planteó un nuevo escenario y aceleró los cambios. Y la más que probable salida de Pallete ahora implica una nueva derivada.
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El Gobierno ya desembarcó en el órgano de gobierno de Telefónica con un consejero. Se trata del economista y exalto cargo en gobiernos socialistas Carlos Ocaña, amigo personal del presidente Pedro Sánchez y muy cercano a él. La entrada de SEPI conllevó la salida de una consejera independiente. El Ejecutivo ha dejado abierta la posibilidad de elevar más su participación accionarial en la teleco, con el probable objetivo de poder contar con dos consejeros y así superar la representación de Arabia Saudí una vez lo solicite. Criteria también cuenta con un solo consejero, igual que BBVA (a pesar de que su participación es inferior al 5% y aritméticamente no tendría derecho a tener presencia en el consejo).
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