Isco agita la varita ante el Getafe
Un giro de bailarín y un toque sutil con el exterior de su bota derecha elevaron a Isco a los altares del Betis, capaz de conquistar el Coliseum con una acción del ‘mago’ verdiblanco a la que añadió un tanto desde el punto de penalti para derrotar 1-2 al Getafe, invicto en liga en 2025 hasta la visita de los hombres de Pellegrini.
La calidad de Isco es inagotable. Cumple con nota casi en cada partido y de vez en cuando se saca un conejo de la chistera para conquistar a los amantes más exquisitos del fútbol. En esta ocasión, el Getafe le sufrió con una acción decisiva en la primera parte con la que el Betis abrió la muralla casi siempre inexpugnable del conjunto azulón para igualar al Rayo en la sexta y última plaza europea.
Pero no sólo fue decisivo Isco, porque todos sus compañeros se apuntaron un tanto con un partido casi perfecto. Hicieron todo lo que había que hacer para doblegar a un equipo como el Getafe en el Coliseum. Jamás titubearon a la hora de disputar cada balón, igualaron en intensidad al equipo de Bordalás y pelearon cada segunda jugada. Además, las caras nuevas que llegaron en el mercado de invierno encajan a la perfección para armar un grupo que en su mejor momento impone respeto.
Con el ‘Cucho’ Hernández y Antony más la embriagadora aparición de Jesús Rodríguez, aportan al Betis un plus de calidad y definición espectacular que con el compromiso grupal, más la magia habitual de Isco, puede generar más de un dolor de cabeza a cualquier rival.
Y eso le pasó al Getafe, que llegaba a la cita invicto en 2025 con cuatro victorias y dos empates en el bolsillo. Esos 14 puntos de 18 posibles le permitían soñar con engancharse a la pelea europea después de bordear el abismo del descenso durante casi todo el curso.
La realidad es que tarde o temprano, Bordalás hace competir a sus equipos. No fallan. Y al Betis le tocó lidiar con el mejor Getafe de la temporada en un momento clave para no descolgarse de la pelea continental. Los hombres de Pellegrini sabían que el duelo era importantísimo y cumplieron.
Los datos de la primera parte, hablan por sí solos: el Getafe, apenas pudo disparar una vez entre los tres palos, justo al borde del descanso y con un gol de Juanmi que fue anulado por un fuera de juego clarísimo. El resto del tiempo, aunque quiso, no pudo. El Betis, fortísimo en todas las líneas, frenó cualquier intento del equipo de Bordalás.
Y una vez igualado el juego en intensidad, el Betis, con la calidad de sus jugadores, poco a poco arrinconó al Getafe, que hincó la rodilla en el minuto 18 en uno de los pocos momentos en los que se echó hacia arriba con más futbolistas de lo habitual. Bernat, que tenía que haber finalizado la jugada, se empachó de pelota, la perdió ante Altimira y enseguida Antony echó a correr con metros por delante.
El brasileño, imparable, llegó a las inmediaciones del área de Soria, cedió la pelota a Isco y la magia apareció por el Coliseum: al mismo tiempo se deshizo de Djené y Duarte con una caricia a la pelota para finalizar la jugada con un fino golpeo imparable para Soria. Hasta algún aficionado del Getafe no tuvo más remedio que aplaudir la obra de arte de un jugador cuyo talento es inagotable.
El gol de Isco dio el pistoletazo de salida a una serie de ocasiones para el Betis que podrían haber sentenciado el partido en la primera parte. Una de ellas fue para Jesús Rodríguez, que volvió a demostrar es un proyecto de jugadorazo. Su velocidad por banda y su desborde han convertido al joven canterano en una auténtica joya que sufrió Duarte en una carrera que terminó con un zurdazo del canterano que despejó Soria.
Y de nuevo con Duarte como protagonista, el Getafe salvó por los pelos de irse al descanso con un 0-2 en contra que habría sido insalvable. Soria, con otra intervención clave, sacó casi bajo la línea un remate en propia meta del central portugués.
El Getafe respiró aliviado con la llegada del descanso. Necesitaba aire y la pizarra de su entrenador para cambiar un duelo que tenía muy mala pinta para el conjunto azulón y que tras la reanudación siguió por los mismos derroteros con los tres de arriba del Betis enchufadísimos.
La conexión Isco-Antony volvió a rozar el gol con un pase del primero al segundo que permitió al brasileño disfrutar de un mano a mano que salvó otra vez Soria. Y el ‘Cucho’, instantes después, cuando faltaba media hora para el final, estrelló un balón contra el palo.
Bordalás, desbordado por la pizarra de Pellegrini, intentó cambiar el rumbo del duelo con la entrada de Carles Pérez y de Álvaro Rodríguez. Pero el Betis siguió a lo suyo, Alderete cometió un claro penalti sobre el ‘Cucho’ e Isco dio en la diana para cerrar una faena de primer nivel que maquilló al final Borja Mayoral. El Getafe asedió sin éxito a su rival en la búsqueda de un milagro que no llegó para no estropear la gran tarde de Isco que terminó con una fea entrada de Antony sobre Juan Iglesias: fue expulsado y se perderá el choque ante el Real Madrid.
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