Él El PP ha ganado claramente las elecciones en Extremadurasiendo la primera fuerza política y obteniendo un escaño más del que tenía. Sin embargo, la suya es una victoria pírrica, de esas en las que se pierde más que se gana.

A pesar de María Guardiola se ha distanciado del PSOE, que ha sufrido una Caída brutal con 10 escaños menos en la Asamblea de Extremadurano ha conseguido la tan ansiada mayoría absoluta. Incluso pese a haber conseguido un escaño, ha obtenido casi 8.000 votos menos que en 2023. Mientras que Vox ha crecido en todos los sentidos: ha duplicado su número de escaños con 40.000 votos más a su favor.

En Génova han intentado evitar esta realidad y hablan de una victoria «rotunda». Por ello, este lunes recibieron a Guardiola entre aplausos y abrazos de Feijóo y sus barones, con una ovación prolongada durante varios minutos.

Alberto Núñez Feijóo lo ha calificado de victoria «incontestable» en unas elecciones que «han sido esclarecedores y no permiten interpretaciones caprichosas» y que han generado un «efecto dominó que no parará». Por su parte, María Guardiola ha pedido a los partidos políticos «responsabilidad y una lectura sensata de lo que dicen las encuestas».

Pero por mucho que intenten ocultarlo, la realidad es que Vox tiene ahora más capacidad de negociación. Porque si los presupuestos, principal motivo por el que Guardiola adelantó las elecciones, son caros, una investidura lo es aún más.

Según ha podido saber laSexta, entre las exigencias de la formación de Santiago Abascal está la presidencia de la Asamblea y tener presencia en organismos públicos. Además, elegir a los senadores por designación autónoma, retirar las subvenciones a los sindicatos, poner fin al acuerdo verde y a las medidas contra la inmigración ilegal.

Un mapa más diestro

Parece que lo único que no buscan es entrar en el Gobierno, ya que es una medida que en otras comunidades les ha perjudicado electoralmente. De esta manera, se ha abierto una nueva batalla entre la derecha.

Por un lado, Feijóo ha advertido a Abascal que no vuelva a cometer el error de ser «adversario nunca más»mientras que el líder de Vox ha puesto el balón en el tejado de Guardiolaquien dice que «debe elegir» entre «tres opciones de pacto con las que tiene mayoría».

Abascal ha sido claro al describir la realidad a la que se enfrentan los populares: «Es el PP el que tiene que decidir, en Extremadura, pero probablemente no sólo en Extremadura». Es decir, deberán concretar qué política van a tomar a partir de ahora, teniendo en cuenta las estimaciones de crecimiento de Vox y el peso cada vez mayor que tiene en distintos territorios de España.

Después de estas últimas elecciones, PP y Vox suman más del 60% de los votos en Extremaduraque se convierte en la comunidad con mayor presencia de la derecha, sólo por detrás Murciadonde estos partidos representan el 60,56%.

A continuación, en el rango del 50%, se encuentran Andalucía con un 56%, el Comunidad de Madrid (54%) y la Rioja (53%).

Los logros electorales de Vox

Por eso, ante las dudas de Feijóo, Vox ha reaccionado a los resultados con excesiva euforia. «Vox es el gran ganador de estas elecciones»Lo celebró el domingo Abascal, que dijo a Guardiola que van a «exigir respeto» a sus votantes.

La extrema derecha ha conseguido más que duplicar sus resultados en Extremadura en apenas dos años. Ahora mire cara a cara al PP en regiones clave. Por ejemplo, ha logrado éxitos innegables como convertirse en la segunda fuerza en Badajozla ciudad más poblada de Extremadura.

En Almarazla formación de extrema derecha junto con el PP tiene casi el 70% de los votos. Allí abogaron por frenar el cierre de la central nuclear de Almaraz. mientras en Talayuela Se centraron en la inmigración. En un municipio con mayor porcentaje de población extranjera, Vox suma ya casi las tres cuartas partes de los votos junto al PP.

«Los extremeños hablaron claro que quieren más del doble que Vox»Se ha manifestado Abascal, tras estos contundentes resultados.

*Seguir laSexta en Google. Todas las novedades y el mejor contenido aquí.