Reputación, pero de la buena
El plan de rearme que afronta la Unión Europea necesita dinero, mucho dinero. Son 800.000 millones de euros los que se pretenden movilizar en los próximos años para que Europa pueda avanzar en su objetivo de autonomía estratégica en materia de defensa. Será necesario que la banca se implique a fondo, pero el sector financiero quiere saber, de antemano, que no incurrirá en el riesgo reputacional que hasta ahora salpicaba de barro a las entidades cada vez que salía a la luz una operación a favor de la industria armamentística.
En España, apenas el 0,1% del crédito bancario total ha ido a financiar la fabricación de armamento o munición en las dos últimas décadas. Y el gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá, ya ha advertido de que será necesario valorar si el actual marco regulatorio y supervisor ofrece los incentivos adecuados para movilizar la financiación bancaria hacia este tipo de inversiones, estratégicas para Europa.
La banca sabe que aquí hay negocio. Basta un dato: los valores europeos del sector aeroespacial y de defensa han subido un 35% en lo que va de año. Pero la clave es superar el riesgo reputacional. Algunas entidades financieras en Europa ya empiezan a dar la cara sin complejos. «BNP Paribas reafirma su compromiso de apoyar la financiación de las empresas del sector de la defensa, principalmente en los países de la OTAN y, en particular, en Europa», afirmaba esta semana el banco francés en un comunicado. BNP presume de que, a finales de 2024, destinó la mitad de su financiación empresarial al sector de la defensa a través de créditos, garantías, emisiones de bonos, financiación de la exportación, gestión de activos o inversiones directas en capital. El arrojo de BNP ha llamado la atención en el sector español. En España y en Europa, la banca espera que las autoridades ayuden a instalar un relato en la sociedad por el que ‘invertir en cañones’ deje de verse como la antítesis deleznable de ‘invertir en mantequilla’. Quieren asegurarse una reputación, pero de la buena.
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