Él PSOE reelegirá Pedro Sánchez como secretario general por tercer mandato consecutivo en el 41 Congreso Federal que los socialistas celebran este fin de semana en Sevilla. Con el presidente del Gobierno asegurando el control de su partido en el futuro inmediato, algo que ya se daba por hecho, las dudas son si los pilares de su ejecutiva continuarán (el vicepresidente y ‘número dos’ del partido, María Jesús Montero.) y cuál será el contenido político para relanzar la formación.

Lo que está claro es que, en el ámbito económico, Sánchez se ha lanzado a darle el abrazo de oso a Yolanda Díazsu vicepresidenta segunda y líder de Sumar, asumiendo como propias algunas de sus tesis e incluso yendo en algunas más lejos que su socio de coalición. El ejemplo más claro es el de la jornada laboral: aunque ya está sobre la mesa la reducción legal a 37,5 horas semanales, los socialistas ya tienen en el horizonte rebajarla a 36 horas en 2030.

«Reducir la semana laboral a 37,5 horas es un paso enorme, pero debemos ir más lejos«, destaca la presentación del Congreso que se va a debatir este fin de semana y que será la guía política del PSOE.

Un día en la media europea

Los socialistas abogan por continuar con reformas estructurales en la economía que permitan ganancias de productividad, al tiempo que promueven negociaciones con los agentes sociales que permitan reducir la jornada laboral a 36 horas semanales. «que es la media que ya tienen hoy los países más avanzados de Europa».

La presentación del PSOE incluye un amplio abanico de medidas y compromisos en materia económica, cuyo contenido y forma son bastante similares a las propuestas que ya están sobre la mesa dentro del Gobierno de coalición. Sin embargo, contiene importantes novedades en materia fiscal, así como nuevas obligaciones para las empresas y un apartado bastante genérico en relación a la financiación autonómicauna de las claves de la legislatura. De hecho, en las 171 páginas del documento la palabra «Cataluña» sólo aparece en una ocasión.

El PSOE de Sánchez abogará tras el 41 Congreso Federal por un «nuevo patrón de crecimiento moderno y sostenible», con el objetivo de aumentar la productividad laboral en un 10%reducir la brecha de renta per cápita con los socios de la UE o promover la digitalización de las pymes y la electrificación del parque de vehículos.

Sánchez propone un nuevo impuesto a la vivienda

En materia fiscal, los socialistas debatirán si ejecutar una Nueva subida del IRPF para las rentas más altassituándolo en el 50% (tres puntos más) para salarios a partir de 300.000 euros. También anticipan cambios en la fiscalidad de los combustibles fósiles, en la línea de igualar la tributación del diésel y la gasolina, aunque con políticas que amortigüen este incremento sobre las clases medias.

Para las empresas, el PSOE propone realizar un aumento automático del Impuesto sobre sociedades de tres puntos, hasta el 28%, en el caso de aquellas empresas en las que sus directivos ganan hasta 40 veces más que la media de sus trabajadores, con la vista especialmente en las que cotizan en el IBEX. Además, las grandes empresas de más de 250 empleados tendrán que repartir, por ley, parte de sus beneficios con los trabajadores, para aquellos casos en los que los beneficios superen el 5% del capital social.

«Esta fórmula ha demostrado favorecer un reparto más equitativo de los beneficios de la empresa, especialmente para los trabajadores con salarios más modestos, y favorecer la motivación de los trabajadores, sin impactar negativamente en la productividad ni en las decisiones de inversión», apunta. la presentación.

Y en materia de vivienda, proponen la creación de otro impuesto especial progresivo a la propiedad a partir de la tercera casa. También proponen incentivos fiscales para la construcción de nuevas promociones y la rehabilitación de edificios, así como un aumento de la carga fiscal de los usos de vivienda no residencial, para que no sean rentables.

De puntillas por Cataluña

Respecto a la reforma de la financiación autonómica, el PSOE no habla específicamente de esta «singularidad» para Cataluña, aunque apuestan por que este nuevo reparto «haga compatible la multilateralidad y la bilateralidad» y que sea «perfectamente conciliable con los adecuados, no -Trato privilegiado.» de singularidades y el mantenimiento de la solidaridad con igual esfuerzo fiscal.

El objetivo es que el sistema proporcione más recursos a las Comunidades Autónomas, revise los impuestos transferidos y evite el dumping fiscal entre regiones. Asimismo, como parte de esta reforma el PSOE incluye uno de sus compromisos de investidura con ERC: la condonación de la deuda autonómica.