Tendencias en medicina estética para 2025
Tras unos años en los que los grandes protagonistas, a nivel estético, eran los rellenos y
principalmente los de labios
, 2025 será un año en el que se apueste por
la naturalidad y por conservar nuestros rasgos, con un aspecto rejuvenecido y un acabado más sutil. La medicina estética y los retoques han dejado de ser una conversación tabú y cada vez más personas se atreven a afirmar que se han hecho retoques.
Un sector que avanza a pasos agigantados y que
cada vez cuenta con más innovaciones, que reduce los tiempos de recuperación y que mejoran el procedimiento post operatorio. ¿Qué veremos este próximo año? Nos lo explican la doctora Elena Jiménez, cirujana plástica y estética y directora médica de Eleca Clinic; la doctora Pilar de Frutos, cirujana plástica y directora de la Clínica Pilar de Frutos; las doctoras Mar Mira y Sofía Ruíz del Cueto, codirectoras de la Clínica Mira + Cueto; el equipo médico de Clínica Ityos; la doctora Flavia Bonina, médica estética experta en naturalidad y directora médica de Clínica Doctora Bonina y David Cubas, director clínico de Zem Wellness Clinic Altea.
Tendencias estéticas 2025
Consultamos a los expertos cuáles serán las principales tendencias en medicina estética para el año 2025 y la mayoría coincide en qué es lo que más veremos. Para la doctora Flavia Bonina, «seguirá cogiendo aún más fuerza la
reciente tendencia del menos es más, donde los volúmenes estarán en segundo plano y ganará la naturalidad, al menos en edades a partir de los 35 años y esperemos que poco a poco sea la opción ganadora en personas más jóvenes, que de momento apuestan por cambios más visibles y a veces más radicales».
En este plano, coincide la doctora Elena Jiménez que afirma que «las tendencias estéticas estarán cada vez más
orientadas hacia la naturalidad y la personalización» y constata que «hemos dicho adiós a los tratamientos con efectos artificiales y el enfoque será más incisivo en la naturalidad». La profesional concluye que «la tecnología sigue avanzando y creando innovaciones que llegan de la mano de la IA con tratamientos altamente especializados».
Para las doctoras Mar Mira y Sofía Ruíz del Cueto, «las tendencias médico – estéticas para 2025 serán todas aquellas que logren regenerar la piel, mejorar su calidad,
estimular la producción de colágeno
, elastina y tejido de sostén a base de estimuladores químicos y físicos. Una medicina estética sin huella en la que la naturalidad seguirán siendo la finalidad». Las expertas añaden que otra gran cuestión del año será que «los hombres serán cada vez más conscientes del beneficio que trae consigo cuidar la salud de su piel con tratamientos que no feminicen el rostro y también seguirán estando en boga todos aquellos tratamientos que logren
quitar errores cometidos en el pasado: pacientes sobretratados, con su huella estética, que quieran verse más naturales, es decir, deshacer cara que han perdido su identidad para que recuperen toda su individualidad, personalidad y esencia».
En definitiva, una apuesta por la naturalidad en líneas generales, en la que los expertos de Ityos también coinciden y consideran aquellos «
rostros más estilizados y con menos volumen excesivo de rellenos». En el caso de los labios estos tendrá «una apariencia más natural. Además, habrá un enfoque creciente en el cuidado integral de la piel, con el uso de tecnologías avanzadas para tratar manchas, minimizar poros y lograr una piel más luminosa y saludable».
La doctora Pilar de Frutos considera que «la cirugía de mama seguirá liderando como la intervención estética más popular en 2025, consolidando su protagonismo a nivel mundial». Para ella, existe también «un
aumento significativo en la demanda de rinoplastias, gracias a técnicas innovadoras que se han ido incorporando en los último años». Otra de las grandes tendencias es, en sus palabras, «el
lifting facial
, impulsado por nuevas técnicas que ofrecen resultados mucho más naturales. Junto con estos procedimientos, la lipoescultura y la cirugía de contorno corporal continuarán siendo fundamentales en el panorama estético».
La naturalidad también va de la mano con «
un equilibrio entre estética, bienestar físico y emocional» afirma David de Cubas, director Clínico de Zem Wellness Clinic Altea. Esto se produce porque «se tiene en cuenta la naturalidad y la personalización, con resultados sutiles que respeten la individualidad de la persona». Por ello, en la clínica ofrecen «tratamientos mínimamente invasivos con avances como los láseres de última generación, radiofrecuencia fraccionada y ultrasonidos focalizados». Añade que «desde el punto de vista de la regeneración y revitalización, priorizamos los tratamientos que promueven la salud y el rejuvenecimiento celular desde dentro con terapias como plasma rico en plaquetas (PRP), bioestimulación con colágeno y péptidos bioactivos».
Además, para el centro que abre sus puertas en Altea «hay una mayor demanda de productos y tratamientos que
respeten el medio ambiente con un tipo de cosmética clean, ingredientes biodegradables y equipos con eficiencia energética».
Intervenciones estéticas más populares
En línea con estas tendencias, irán las intervenciones más populares del año 2025. La doctora Flavia Bonina considera que veremos mucho «los inductores de colágeno,
los neuromoduladores
y el ácido hialurónico, por supuesto, en especial para
embellecer mentón, labios y pómulos». En Zem Wellnes Clinic Altea también mencionan «el contorno facial y rejuvenecimiento no quirúrgico, con biorremodeladores. Rellenos ligeros para redefinir mandíbula, pómulos y labios, manteniendo una apariencia natural».
Por su parte, cree la doctora Elena Jiménez que «la demanda de
procedimientos mínimamente invasivos seguirá en aumento. Esto incluye tratamientos ya conocidos y otros que van ganando terreno». ¿Cuáles serían? «Los rellenos dérmicos con ácido hialurónico, técnicas de inyección más avanzadas tanto en la forma según el tipo de arruga como en multiplano para la armonización facial; neuromoduladores con nuevas toxinas que se incorporan al mercado; estimuladores de colágeno, cada vez con técnicas más seguras según el tipo de flacidez». La doctora también añade «
tratamientos para la mejora de la piel
, tanto en calidad dérmica como en la textura, como láser, radiofrecuencia o microneedle».
Para los profesionales de Ityos, «el aumento y la elevación de pecho seguirán siendo de las cirugías más demandadas». Los expertos también destacan que «se están popularizando tecnologías que permiten
eliminar grasa y tensar la piel en una misma intervención, sin recurrir a liposucciones tan invasivas». Otras tendencias nuevas serán «liftings parciales, ya que estas intervenciones menos agresivas reposicionan tejidos en áreas específicas del rostro, con mínimas incisiones, en lugar de los tradicionales liftings faciales completos».
A nivel corporal, David de Cubas, director clínico de Zem Wellness Clinic Altea, menciona «la
remodelación corporal no invasiva con crioliópolis avanzada (CoolSculpting) para eliminar grasa localizada, remodelación muscula y reducción de grasa con tecnologías como Emsculpt y la radiofrecuencia corporal para tensar la piel y tratar la celulitis».
Tratamientos estéticos más demandados
Existe una gran variedad de tratamientos disponibles en el mercado estético que en 2025 ofrecerán diferentes opciones personalizadas para los pacientes. En el caso de la doctora Pilar de Frutos, ella afirma que «los tratamientos más demandados serán los
rellenos con ácido hialurónico, utilizados de forma más moderadas». Considera también a los neuromoduladores por «sus buenos resultados y mínimos efectos secundarios. No obstante, ahora se buscará un efecto más natural, con una movilidad facial menos rígida y respetando ciertas líneas de expresión». La profesional tiene en cuenta también «tratamientos como
los exosomas
y los polinucleótidos, que no rellenan, pero ayudan a ralentizar el envejecimiento, serán revolucionarios. También los estimuladores de colágeno, que combaten la flacidez y promueven un envejecimiento más lento y armonioso, ganarán protagonismo».
La doctora Elena Jiménez, cirujana plástica y estética en Eleca Clinic, cree que serán muy populares «los
tratamientos que combinen tecnología con biocompatibilidad». ¿Cuáles serían estos? «Autoterapias biológicas, basadas en el propio plasma; exosomas autólogos que son la bioestimulación desde el núcleo de la célula de forma absolutamente individualizada». Otra tendencia será la «bioestimulación y prevención a nivel capilar, con cambios en la dieta y suplementación específica que potencia el crecimiento del cabello» y «tratamientos médicos específicos capilares, mediante antiandrógenos adaptados a hombre y mujer según el tipo de alopecia». Añade también «tratamientos de contorno corporal, endoláser, tratamientos de células madre y medicina estética integrativa y personal».
En el caso de la doctora Flavia Bonina, serán muy populares «
los neuromoduladores» porque «tenemos un amplísimo abanico de opciones». La experta menciona también «el auge de la apartología de última generación» y «los labios en cuanto a rellenos, siempre en su justa medida y de forma 100% personalizada para ensalzar su jugosidad y embellecer su forma natural».
Las doctoras Mar Mira y Sofía Ruíz del Cueto coinciden y consideran los
estimuladores de colágeno, además de los inductores de colágeno. Para las expertas, a nivel inyectables destacan la «hidroxiapatita cálcica, el ácido poliláctico, la policaprolactona y la polidioxanona (en forma de geles o de hilos)». En cuanto a la aparatología, consideran aquella que «produzca una lesión tisular controlada, como radiofrecuencia, ultrasonidos microfocalizados de alta intensidad (HIFU), láser e IPL». Concluyen que «según la penetración y la intensidad producirán más o menos colágeno y de una manera más superficial, profunda o en varios planos».
Desde la Clínica Ityos tienen muy en cuenta «una preferencia por la eliminación de volúmenes exagerados y un incremento en el uso de productos estimuladores de colágeno y
mesoterapias personalizadas
. Estas pueden ser aplicadas tanto de forma inyectable como combinadas con tecnologías avanzadas, como el SkinPen, para
tensar y rejuvenecer la piel de manera integral».
Por último, en Zem Wellnes Clinic Altea creen que serán muy populares «la revitalización cutánea, con terapidas de inducción de colágeno, láseres de nueva generación para reducir manchas, cicatrices y mejorar textura y PRP (plasma rico en plaquetas) combinado con bioestimuladores». Mencionan también «la
prevención del envejecimiento con bioestimuladores con mesoterapia con cócteles de vitaminas, péptidos y antioxidantes para hidratar y revitalizar. No podemos olvidar «la estética capilar con microinjertos capilares con técnicas de alta precisión y terapias regenerativas para combatir la caída del cabello como PRP o células madre».
Tendencias estéticas que ya no se llevan
La llegada de nuevas tendencias hace que otras pierdan popularidad, bien sea porque las nuevas técnicas mejoran procesos anteriores o porque los resultados dejan de ser los más demandados, en pro de otros. En el año 2025, la doctora Flavia Bonina considera que «seguiremos utilizando los mismos tratamientos, pero, por ejemplo, en algunos como el ácido hialurónico tenderemos a poner menos cantidad». La profesional considera que «este año hemos visto y escuchado muchas barbaridades y
ya no queremos esos overfilled o cara de almohada, sino todo lo contrario, naturalidad y belleza, al final, combinando tratamientos podemos conseguir unos resultados espectaculares y muy naturales».
Un enfoque en el que también coincide la doctora Pilar de Frutos que afirma que «las tendencias estéticas estarán claramente influenciadas por un regreso a la naturalidad. Tras los cambios que han marcado 2024, se observa una
preferencia por un envejecimiento natural, con retoque más sutiles y volúmenes discretos». Añade que «esto se refleja no sólo en los tratamientos faciales de medicina estética, sino también en las cirugías, especialmente las mamarias. La nueva tendencia se orienta hacia resultados más equilibrados y naturales, alejándose en los excesos en pechos y glúteos que se caracterizaron en años anteriores».
Por su parte, la doctora Elena Jiménez cree que «el enfoque
se alejará de procedimientos altamente invasivos, que requieren largos tiempos de recuperación, aunque ante ciertas situaciones es necesario recurrir a los procedimientos algo más invasivos». Destaca también que «a medida que muchas terapias alcancen popularidad se aumentará la búsqueda de resultados más naturales, con un aspecto más auténtico y que permitan seguir con la vida diaria de una forma más rápida».
Por último, el equipo de la Clínica Ityos destaca que «los hilos tensores han ido perdiendo popularidad en favor de técnicas menos invasivas como los estimuladores de colágeno». Matizan que «aunque los hilos ofrecen buenos resultados, estos pueden lograrse de manera similar con
nuevos productos y procedimientos que resultan más cómodos y eficaces para el paciente».
Puedes consultar la fuente de este artículo aquí