Los ejércitos de China y Estados Unidos mantuvieron conversaciones sobre seguridad marítima en una reunión celebrada del 18 al 20 de noviembre en Hawaii (EE.UU.), informó este sábado la Armada china, en medio de la restablecimiento paulatino de los contactos militares entre ambas potencias.

En un mensaje difundido a través de la red social WeChat, la Armada china indicó que el encuentro fue «franco y constructivo» y se centró en «la actual situación de seguridad marítima y aérea entre China y Estados Unidos».

Las delegaciones evaluaron la implementación anual del código de conducta para la seguridad en los encuentros marítimos y aéreos entre ambas partes, discutieron medidas para mejorar la seguridad militar marítima bilateral e «intercambiaron puntos de vista» sobre los temas de la reunión del grupo de trabajo de 2026, señala el texto.

«Ambas partes coincidieron en que las reuniones del Mecanismo de Consulta sobre Seguridad Militar Marítima contribuyen a que las unidades de primera línea de las fuerzas navales y aéreas de ambos países interactúen de manera más profesional y segura, lo que favorece evitar malentendidos y errores de juicioy gestionar riesgos y crisis», dijo la Armada china.

Durante este último encuentro, Beijing también expresó su «firme oposición» a cualquier acción que, so pretexto de la libertad de navegación o de sobrevuelo, «dañar la soberanía y la seguridad de China», al tiempo que mostró su rechazo «a cualquier provocación o actividad de reconocimiento cercano dirigida contra China».

«China continuará defendiendo firmemente su soberanía territorial y sus derechos e intereses marítimos de conformidad con la ley, y salvaguardará la paz, la estabilidad y la prosperidad regionales», concluyó la Armada.

Este encuentro se produjo semanas después de la reunión celebrada en Kuala Lumpur entre el secretario de Guerra de Estados Unidos, Pete Hegseth, y el ministro de Defensa chino, Dong Jun, en la que el jefe del Pentágono advirtió que Washington estaba preocupado por las acciones de China en torno a Taiwán.

En respuesta, el ministro chino subrayó que la «reunificación» entre ambos lados del Estrecho es una «tendencia histórica irreversible», e instó a EE.UU. a adoptar una postura clara contra la «independencia de Taiwán», isla gobernada de forma autónoma desde 1949.

Tras ese diálogo, Hegseth aseguró que había coincidido con Dong en la necesidad de establecer una línea de comunicación a nivel militar para evitar escaladas.