Querer duele mucho, pero debemos ser felices amando
«¿Duele querer?», preguntó el párroco Francisco Javier Panizo durante la homilía en honor a Todos los Santos, celebrada ayer al mediodía en el camposanto de La Carriona. Se respondió: «Duele muchísimo, porque hace que nuestro corazón sea sensible y frágil ante circunstancias como la muerte o la enfermedad de un ser amado». «¿Entonces es mejor no querer?». «Depende de si nos gusta tener un corazón de esparto», sentenció el párroco ante decenas de personas —cientos, quizá— que seguían la homilía a pie quieto bajo un cielo plomizo que primero amenazaba lluvia y, luego, dio paso a la luz.
[–>[–>[–>Panizo, ayer, con su móvil, durante la homilía.
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Dijo Panizo que «en ocasiones, aunque el amor duela, aunque el amor haya sido cercenado por la muerte, nosotros tenemos que ser felices amando». ¿Por qué? «Porque de nosotros sigue dependiendo gente preciosa, muchas personas que nos quieren y que precisan de nuestra sonrisa, de nuestra paciencia, de nuestra compañía y de nuestro cuidado».
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Luis Antonio Rodríguez, 93 años, depositando flores en la tumba de su madre, ayer, en La Carriona.
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Francisco Javier Panizo, que debutó en la ciudad yacente allá por 2018, recordó a los asistentes reunidos en el cementerio avilesino que «estamos en una estación de tránsito, en la que nos vamos haciendo compañía unos a otros, haciendo que la espera no sea tediosa hasta que a cada uno de nosotros nos llegue el momento de tomar ese tren».
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Panizo fue cura desde el púlpito del camposanto, y durante un momento también amigo, compañero, guía y asesor. Y un cura 2.0, con móvil en lugar de misal.
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Fieles, al mediodía, en el cementerio avilesino, durante la misa.
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El cielo barruntaba lluvia. Y el frío que al amanecer encogía los cuerpos vivos dejó paso al calor en La Carriona. Panizo continuó con su homilía, que solo interrumpió mientras pasaba un avión. La Carriona miró entonces seis segundos al cielo.
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El último tren a la eternidad.
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Siguió con un poema, del que no quiso dar el autor, aunque aclaró: «Era ateo, pero el poema tiene una enorme belleza y quería compartirlo con vosotros, porque a veces decimos que no sabemos qué hacer».
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[–>Después, leyó los versos –atribuidos a Pablo Neruda, de Cuadernos de Temuco–:
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«Vivir serenamente, sin agitarse nunca, una vida alumbrada por la luz del amor, y tener para todas las ilusiones truncas la pequeña tristeza de un pequeño dolor…
[–>[–>[–>Tener en la mirada, serenamente pura, el poder y el prestigio de alguna elevación, y sentir en el alma la emoción de la altura y unas ansias sagradas de purificación… Y tener para todos los seres y las cosas una dulce alegría, risueña y generosa, perfumada del hondo contento de vivir.
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Entonces, sólo entonces, vivir serenamente, sin agitarse nunca y graciosamente, en la mansa dulzura de una tarde, partir…».
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Panizo invitó a mirar la muerte no como una ruptura, sino como una continuidad del amor. «Un día como hoy venimos especialmente sensibilizados. Puede que haya personas que estén aquí descansando desde hace muchos años, pero desatan en nosotros muchos sentimientos, a veces dolorosos, siempre intensos», dijo.
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¿Y qué duele? «Es un dolor que se llama nostalgia. Recordamos muchas cosas pasadas, recordamos, a veces falseándolo, un paraíso perdido: qué felices éramos en aquella época, que era todo miel sobre hojuelas, vinos, rosas, alegría… Mentira. Eran días tan complicados como pueden ser hoy, pero estaba la persona amada, y eso hacía que las dificultades parecieran menores».
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La Carriona se consolidó ayer como una parada hacia la eternidad. En la comarca se oficiaron tantas misas como iglesias hay. En cada una, un recuerdo para los que ya no están, porque su tren ha partido ya.
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AVILÉS San Nicolás: 10.00, 11.30, 18.30 y 18.30 horas (Funeral solemne a las 12.30 y responso en cripta 13.15 horas). La Luz: 12.00 horas Villalegre: 13.00 horas La Carriona: 10.30 horas Miranda: 11.30 horas San Cristóbal: 12.15 horas San Juan de Ávila: 11.00, 12.00 y 13.00 horas La Magdalena: 12.00 horas San Agustín: 11.00 horas Cristo Rey de Versalles: 13.00 horas CASTRILLÓN Piedras Blancas: 9.00, 11.00 y 12.00 horas. San Martín: 13.00 horas San Miguel de Quiloño: 11.00 horas San Cipriano de Pillarno: 12.00 horas Salinas: 12.00, 13.00 y 18.00 horas CORVERA Trasona: 12.00 horas Solís: 10.00 horas Santa María de Cancienes: 11.00 horas Los Campos: 13.00 horas GOZÓN Luanco: 12.00 horas Bañugues: 13.00 horas San Jorge de Heres: 10.30 horas. ILLAS Illas: 13.00 horas. SOTO DEL BARCO Soto del Barco: 12.00 horas Villafría: 13.00 horas
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