Un todoterreno eléctrico visto en Barcelona
Conocer el Jeep Recon ha sido toda una sorpresa. Durante la presentación dinámica internacional del nuevo Jeep Compass, en Barcelona, de la que hablaremos en muy pocos días, la marca norteamericana nos sorprendió con la posibilidad de contemplar de manera estática en primicia el Jeep Recon 2026, un vehículo que viene a llenar un vacío en el mercado: el de los todoterrenos “de verdad” 100 % eléctricos, vacío que empezará a llenarse con este modelo cuando se lance bien avanzado el año 2026.
Aunque este Jeep Recon era en realidad una maqueta estática a escala 1:1, sí pudimos sacar algunas conclusiones del que será, junto al inaccesible Mercedes G 580, el único todoterreno eléctrico del mercado hasta que otras marcas como Toyota o Land Rover se decidan a lanzar sus propuestas.
El Jeep Recon está diseñado para ser un automóvil con elevadas capacidades fuera del asfalto, teóricamente cercanas a las de un Jeep Wrangler pero partiendo de una carrocería autoportante y propulsándose mediante motores eléctricos. Así que en muchos aspectos será comparable al Jeep Wrangler, mientras que técnicamente tiene más que ver con el ya conocido Wagoneer S.
Prestaciones extraordinarias para el Jeep Recon
Más allá de su sistema motriz eléctrico con un motor para cada eje, la principal diferencia del Jeep Recon con el Wrangler se encuentra en que el primero se basa en una carrocería autoportante apoyada en suspensiones independientes para las cuatro ruedas, mientras que el Wrangler parte de un chasis de largueros y travesaños suspendido sobre dos ejes rígidos.
Pero si técnicamente el Jeep Recon y el Jeep Wrangler son netamente diferentes, lo cierto es que el objetivo es que sirvan para lo mismo. Y eso es lo verdaderamente fascinante de este vehículo, que en Jeep aseguran que es capaz de superar el Rubicon Trail. Con la experiencia de haberlo recorrido en dos ocasiones (2007 y 2018), os puedo asegurar que es un escenario casi imposible para un todoterreno convencional sin una mínima preparación, ruedas de gran diámetro y mucha altura libre.
Así que el Jeep Recon 2026 promete cifras impresionantes: 650 CV, 840 Nm de par instantáneo y una autonomía estimada de hasta 450 kilómetros. La aceleración de 0 a 100 km/h se completa en apenas 3,7 segundos, un dato un tanto absurdo para un automóvil con ruedas de tacos, pero en cierto modo es algo que “sale gratis”, ya que si quieres tener suficiente par motor y capacidad de regeneración en un 4×4 eléctrico, vas a tener que disponer de dos potentes motores eléctricos y, ya que están ahí…
Este torrente de potencia y par motor será gestionado por una interfaz de escenarios de conducción Selec-Terrain que ofrecerá cinco programas de conducción distintos para adaptarse a cada condición de superficie y climatología, incluyendo un modo Rock pensado para superar las trialeras más extremas.


Por supuesto, todo este despliegue va acompañado de unas suspensiones independientes de largo recorrido completamente nuevas. En este sentido, desde la aparición de los primeros Hummer militares (1985) hasta la llegada de la última generación del Clase G (en 2018), con su tren delantero independiente, pasando por el Mitsubishi Montero III (1999) o en Land Rover Discovery III (2004), muchos son los todoterrenos que nos han demostrado que unas buenas suspensiones independientes pueden ser incluso mejores que los ejes rígidos.
El espíritu open-air heredado del Wrangler es un factor diferencial del Jeep Recon
A pesar de su carrocería autoportante, el Jeep Recon será el único 4×4 eléctrico del mercado diseñado con puertas desmontables, cristal del portón trasero y ventanillas traseras laterales extraíbles, todo ello sin necesidad de herramientas; pura libertad en cuestión de minutos, tal y como anuncia su fabricante.
El diseño exterior rinde homenaje al ADN Jeep con su característico frontal de siete ranuras iluminadas, amplia superficie acristalada y rueda de repuesto de tamaño completo en la portezuela trasera.
Hablamos, además, de neumáticos todoterreno de gran diámetro, en medida 265/70 R18, equivalentes a los de un Jeep Wrangler e imprescindibles para poder enfrentarse a las trialeras más abruptas de un escenario como el Rubicon Trail por aquello de que el tamaño del obstáculo es inversamente proporcional al diámetro del neumático.


En cuanto al tacto o las calidades poco podemos decir, ya que el vehículo era una maqueta a escala 1:1; ni siquiera se trataba de una unidad de preserie. Su presencia es bastante imponente, pero de alguna manera parece que se queda a medio camino entre un SUV y un verdadero Wrangler, en una tierra de nadie.
Las bisagras de las puertas a la vista, las proporciones o las ruedas todoterreno (incluida la de repuesto, colgada en la zaga) sugieren que estamos ante algo parecido a un Wrangler, pero las aletas integradas en la carrocería o la falta de una estructura tubular y un techo desmontable nos hacen pensar en un SUV venido a más, más que en un todoterreno civilizado.
En cualquier caso, la producción del Jeep Recon 2026 comenzará a principios del próximo año en la planta de Toluca (México), con la llegada de las primeras unidades prevista en Estados Unidos y Canadá, a lo que seguirá una expansión global en el cuarto trimestre.
Aunque todavía queda tiempo para conducirlo, esta primera toma de contacto visual y táctil nos confirma que Jeep va en serio con su ofensiva eléctrica sin renunciar a lo que siempre ha definido a la marca: capacidad todoterreno sin límites y espíritu aventurero; ahora en formato 100 % eléctrico.


































































Puedes consultar la fuente de este artículo aquí